Muy poca gente comprende al corazón, tu corazón es una pieza maestra. Es un instrumento increíble. Tiene el potencial de crear vibraciones y armonías de una belleza que supera con creces las que pueden producir los pianos, los violines o las flautas. A un instrumento puedes escucharlo, pero a tu corazón puedes sentirlo. Y si crees que sientes un instrumento, es solo porque su sonido ha tocado tu corazón.
Tu corazón es un instrumento formado de una energía extremadamente sutil que pocas personas llegan a apreciar.
Si en un momento dado el corazón se abre, nos enamoramos. Si en otro momento el corazón se cierra, el amor cesa. Si sucede que el corazón se resiente, entonces nos volvemos ariscos, y si dejamos completamente de sentirlo, nos sentimos vacios. Esa es la pura realidad!
Deciros que todo esto ocurre debido a que el corazón pasa por innumerables cambios. Estas modificaciones y variaciones energéticas que tienen lugar en tu corazón GOBIERNAN TU VIDA.
Estás tan identificado con esos cambios que empleas las palabras YO y MI, cuando te refieres a lo que está ocurriendo en tu corazón. Pero la verdad es que tu no eres tu corazón, tu simplemente eres el experimentador de tu corazón.
En realidad es muy sencillo comprenderlo. Este es un centro de energía, un chakra. De entre todos los centros de energía, el del corazón es uno de los más bellos y poderosos, y uno de los que mayor efecto ejerce en nuestra vida.
Como hemos visto, un centro de energía es una zona dentro de tu ser a través de la cual la energía se concentra, se distribuye y fluye.
El corazón controla el flujo energético abriéndose y cerrando.
Esto significa que es como una válvula que permite que el flujo de energía lo atraviese o bien restringirlo. Si observas tu corazón te darás cuenta con toda claridad de lo que se siente cuando está abierto y de lo que se siente cuando está cerrado, El estado del corazón cambia con mucha frecuencia, puedes estar experimentando grandes sentimientos de amor en presencia de alguien, hasta que en un momento dado esa persona dice algo que no te gusta. Entonces simplemente tu corazón se cierra y dejas de sentir amor.
Todos hemos experimentado eso, pero, ¿qué es lo que lo causa exactamente?
¿Qué es lo que hay en la estructura de ese centro que es el corazón que le lleva a cerrarse?
Si lo observas, te darás cuenta que el corazón se cierra debido a que lo bloquean patrones energéticos de tu pasado que quedaron inconclusos y que permanecen almacenados. Para entender este proceso, basta con que examines tus experiencias cotidianas. Cuando en el mundo ocurren eventos, estos penetran en ti a través de tus sentidos y ejercen un impacto en tu estado de ser interior. El hecho de experimentar estos eventos puede suscitar en ti algún temor, algo de ansiedad o tal vez amor. Todo depende de cómo tú percibes las cosas. ´
El corazón controla el flujo energético abriéndose y cerrando.
La vida te irá trayendo personas y situaciones que estimulen tu crecimiento. No tienes que decidir quién tiene razón o quién está equivocado, no tienes que preocuparte por los problemas de los demás, solo tienes que estar dispuesto a abrir tu corazón ante cualquier cosa y permitir, de ese modo, que se produzca el proceso de purificación.
Si estas buscando sinceramente la verdad, suelta cada vez que se te presente la ocasión Este es el principio y el fin de todo el camino: rendirse al proceso de soltar y vaciarse. Cuando trabajas de esta manera, vas descubriendo y aprendiendo paulatinamente las sutiles leyes que gobiernan el proceso de soltar.
Sea lo que sea suéltalo.
Si caes alguna vez a lo largo del camino, simplemente levántate y olvídalo. Emplea esa lección para fortalecer tu resolución. Suelta en ese mismo momento. Porque sino iras bloqueando todas esas energías dentro de ti, especialmente en el CORAZÓN, esto en sánscrito se llaman Samkaras.
No pierdas el tiempo y usa esa energía para ascender. Tu eres un gran ser al que se le ha concedido la inmensa oportunidad de poder explorar más allá de sí mism
El corazón tiene el poder de cambiarlo todo, el poder está en ti. Así que no dejes que nada, ni nadie cierre tu corazón.
Nathalie Comas
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